Los procesos habituales de la elaboración de alimentos, tiene como objeto la transformación inicial del alimento crudo, para la obtención de otro producto distinto y transformado, generalmente mas adecuado para la ingesta.
El proceso de conservación tiene como objeto la interrupción de la actividad microbiana y prolongar la vida útil de los alimentos, para ello se puede utilizar la pasteurización, esterilización antibiótica, esterilización por radiación y acción química, refrigeración y deshidratación para después envasar el alimento y ser ingerido.
Finalmente, todos los nutrientes digeridos se absorben a través de las paredes intestinales y se transportan a todo el cuerpo. Los productos de deshecho de este proceso comprenden partes no digeridas de los alimentos conocidas como fibra y células viejas que se desprenden de la mucosa.
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